El animal se movió silenciosamente a través del árbol, de rama en rama. Lentamente, comenzó a descender y pronto aterrizó en el suelo. Una vez allí, se levantó erguido sobre dos pies y se alejó. Vivir en los árboles no significa que no puedas caminar sobre dos pies.

Ardipithecus es un hominino temprano que se conoce por restos fósiles encontrados en Etiopía, África. Este grupo existió aproximadamente de 5.8 a 4.4 millones de años atrás. La especie más conocida de ese grupo, Ardipithecus ramidus, data de hace 4.4 millones de años. Esta especie era bípeda, aunque aún dependía en gran medida de la vida en los árboles.

Ardipithecus ramidus tenía un cerebro pequeño, midiendo alrededor de 350 centímetros cúbicos, es decir del tamaño aproximado de dos y medio pelotas de tenis. El tamaño del cerebro de esta especie de hominino era pequeño incluso comparado con el chimpancé, que tiene un cerebro de unos 400 centímetros cúbicos. Si comparamos, los cerebros humanos son casi tres veces más grandes. Ardipithecus comía principalmente frutas y no incluía mucha carne en su dieta. ¿Crees que esto haya sido en parte la razón por la cual sus cerebros eran tan pequeños?

Cerebros y cuerpos

Ardipithecus ramidus y los chimpancés tienen un tamaño corporal similar. Si comparamos, entonces, podemos decir que Ardipithecus ramidus tenía un tamaño de cerebro relativo más pequeño que el de los chimpancés. Dado su pequeño tamaño cerebral, no es sorprendente que no se hayan encontrado herramientas de piedra asociadas a Ardipithecus ramidus. Sin embargo, es también posible que miembros de este grupo hayan usado herramientas simples, tal como lo hacen los chimpancés. Por ejemplo, los chimpancés usan palos para “pescar” termitas. Desafortunadamente, este tipo de herramientas no se conservan en el registro fósil.